Instalación de ventanas con rotura de puente térmico

Ventanas con rotura de puente térmico

Las ventanas con rotura de puente térmico representan una de las soluciones más eficaces para mejorar la eficiencia energética en viviendas y edificios. Su uso se ha extendido considerablemente en los últimos años, gracias a su capacidad para reducir pérdidas de calor, mejorar el confort interior y contribuir a un menor consumo energético.

Este tipo de ventanas están especialmente recomendadas en zonas con climas fríos o con grandes oscilaciones térmicas, aunque su instalación resulta igualmente beneficiosa en cualquier región donde se busque optimizar el rendimiento energético del hogar.

Ventajas de las ventanas con RPT

La principal ventaja de las ventanas con rotura de puente térmico es el incremento en la eficiencia energética de la vivienda. Al reducir las pérdidas térmicas, se minimiza el uso de calefacción y aire acondicionado, lo que se traduce en un menor consumo energético y una bajada notable en la factura mensual.

Ventanas de aluminio con RPT

Estas ventanas eliminan uno de los problemas más comunes en los perfiles metálicos: la condensación interior. Al evitar los contrastes de temperatura en la superficie del marco, se reduce la aparición de gotas de agua, moho o manchas de humedad en las paredes cercanas.

Otra mejora añadida es la reducción del ruido exterior. Aunque la rotura térmica no está pensada como solución acústica, su efecto combinado con un buen acristalamiento proporciona un ambiente interior más silencioso. En cuanto a diseño, las ventanas con RPT permiten acabados distintos en la cara interior y exterior del perfil, lo que facilita adaptarlas tanto a la estética de la fachada como a la decoración del interior.

La elección entre ventanas de PVC y ventanas de aluminio con rotura de puente térmico depende de diversos factores como el presupuesto, el diseño, la ubicación geográfica y el tamaño de los huecos a cubrir.

El PVC es un excelente aislante natural, fácil de mantener y con un precio generalmente más competitivo. Es muy adecuado para obras de reforma o viviendas con huecos de tamaño estándar donde no se requiera una estructura de gran rigidez.

El aluminio con RPT, por su parte, ofrece una resistencia estructural muy superior, siendo la opción preferida para grandes ventanales, puertas correderas pesadas o fachadas expuestas. Además, permite una mayor variedad de acabados estéticos y una larga vida útil, incluso en condiciones climáticas exigentes. Ambas opciones pueden alcanzar altos niveles de eficiencia térmica siempre que se combinen con acristalamientos adecuados y una instalación profesional.

Sistemas de apertura compatibles

Los sistemas con rotura de puente térmico están disponibles en múltiples tipologías de apertura: abatibles, oscilobatientes, correderas, pivotantes y plegables. Esta versatilidad permite adaptar las ventanas de aluminio al diseño y funcionalidad de cada estancia, sin renunciar al aislamiento térmico.

Ventanas oscilobatientes con RPT

En zonas donde se busca máxima estanqueidad y eficiencia, las aperturas practicables siguen siendo la opción más recomendada. Para salones u otros espacios donde se prioriza la estética o el aprovechamiento del espacio, las correderas con RPT ofrecen una buena solución equilibrada.

El papel del vidrio como aislante

El rendimiento térmico de una ventana no depende solo del perfil. El vidrio es un elemento clave y debe elegirse en función del clima, la orientación y el nivel de confort deseado. La opción más habitual es el doble acristalamiento con capa bajo emisiva y cámara rellena de gas argón. Este sistema permite mantener el calor en invierno y evitar la entrada excesiva de radiación solar en verano.

ventanas con triple acristalamiento

Para entornos con temperaturas extremas o edificaciones pasivas, se recomienda el uso de triple acristalamiento. En orientaciones con alta exposición solar, los vidrios con control solar pueden reducir el sobrecalentamiento interior sin afectar la luminosidad. Una combinación adecuada entre carpintería y vidrio garantiza el máximo aislamiento térmico y acústico.

Normativa, certificaciones y ayudas

Las ventanas con rotura de puente térmico deben cumplir con el Código Técnico de la Edificación (CTE), que establece exigencias específicas según la zona climática. Su correcta instalación contribuye a mejorar la calificación energética del inmueble y es requisito en proyectos de obra nueva o rehabilitación.

Además, deben contar con marcado CE y disponer de una etiqueta energética que indique su nivel de aislamiento térmico y acústico. Esta etiqueta, similar a la de los electrodomésticos, clasifica el rendimiento del producto desde la categoría G (menos eficiente) hasta A+ (más eficiente).

En muchas comunidades autónomas existen Planes Renove para sustituir ventanas antiguas por modelos más eficientes. Estas ayudas pueden cubrir entre un 20 % y un 40 % del coste, dependiendo del proyecto. A estas se suman los fondos Next Generation de la Unión Europea, que financian proyectos de rehabilitación energética tanto individuales como en comunidades de vecinos. Para acceder a estos programas, es imprescindible que los materiales instalados cumplan con los requisitos técnicos establecidos.

Recomendaciones para una elección acertada

A la hora de elegir ventanas con RPT, se recomienda solicitar siempre el valor U del conjunto (perfil + vidrio), verificar que el producto esté certificado, y que sea instalado por profesionales cualificados. Una buena ventana puede perder gran parte de su rendimiento si no se coloca correctamente o si no está bien sellada.

También es importante adaptar la elección del sistema a las condiciones específicas del edificio: clima, orientación solar, ubicación geográfica, nivel de ruido y tipo de uso de cada estancia. Consultar con un técnico especializado puede marcar la diferencia entre una reforma funcional y una solución realmente eficiente.

Conclusión

Las ventanas con rotura de puente térmico son una solución moderna, eficiente y rentable para mejorar el confort térmico y reducir el consumo energético. Su instalación aporta ventajas tanto en términos económicos como en calidad de vida, y es compatible con numerosos programas de ayuda pública.

Gracias a su alto rendimiento y a su capacidad para adaptarse a cualquier diseño, se han convertido en la opción preferida tanto en proyectos de obra nueva como en reformas de viviendas. Como has leído, una ventana de calidad solo ofrece su máximo rendimiento con una instalación a su altura. Para garantizar un aislamiento perfecto y la máxima durabilidad, necesitas expertos que cuiden cada detalle.

Ese es nuestro compromiso en Lozano Aluminios. No dejes una decisión tan importante en manos de cualquiera. Llámanos o contacta con nosotros. ¡Te asesoraremos sin compromiso!